El reporte realizado por Wildlife Conservation Society (WCS) revela que entre enero y junio de este año, se registraron 351 noticias sobre decomisos de fauna silvestre de procedencia ilegal, en los portales informativos y redes sociales de las autoridades gubernamentales de los países andino-amazónicos.
Al cumplirse un año y medio de la pandemia causada por el COVID-19, y a pesar de que se ha evidenciado la estrecha relación que existe entre la salud humana, el bienestar animal y el equilibrio de los ecosistemas, el comercio ilegal de fauna silvestre se ha mantenido vigente en los países andino-amazónicos, tal como lo evidencian las cifras de decomisos reportadas en el primer monitoreo semestral de 2021.
La generación de información sobre tendencias emergentes alrededor de esta problemática es necesaria para fortalecer la toma de decisiones y respuestas, desde el rol de las autoridades, así como de la sociedad civil, con el fin de combatir este delito transnacional. Es por ello que, WCS, en el marco de la Acción regional “Alianza por la Fauna Silvestre y los Bosques”, continuó con el monitoreo permanente de esta problemática a nivel regional, a través de la recopilación y análisis de las noticias sobre decomisos de fauna silvestre viva (anfibios, aves, mamíferos, reptiles y peces), o sus partes, como resultado de acciones de control, que fueron publicadas en portales informativos y redes sociales de agencias de gobierno de Colombia, Ecuador, Perú, Bolivia y Brasil (Estados de Acre y Amazonas). Así, durante el periodo de enero a junio de 2021, se identificaron 351 noticias sobre decomisos de fauna silvestre en estos países, de las cuales 162 corresponden a Ecuador, 68 a Bolivia, 65 a Colombia, 34 a Perú y 22 a Brasil.
Con base en los datos de noticias de decomisos de fauna silvestre, se calcula que fueron 224 las especies silvestres intervenidas, de las cuales un 46% son aves, un 33% mamíferos, un 16% reptiles, un 4% peces (de agua dulce, tiburones y otros peces marinos), y el 1% anfibios. Además, se constató que durante los meses de enero, mayo y junio se publicó el mayor número de reportes de decomisos de fauna silvestre en los medios de comunicación de los países andino-amazónicos evaluados, con un total de 66 noticias en enero y febrero, y 70 noticias en el mes de junio.
Durante el periodo de análisis se evidenció que la tortuga hicotea (Trachemys sp.) fue una de las especies con mayor frecuencia de aparición en las noticias sobre decomisos, seguida de la tortuga motelo o morrocoy (Chelonoidis denticulata) a pesar de estar incluida en el Apéndice II de la Convención sobre el Comercio Internacional de Especies Amenazadas de Fauna y Flora Silvestres (CITES), y encontrarse en estado Vulnerable (VU) según la Lista Roja de Especies Amenazadas de la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN). En este tipo de reportes también figuraron con mayor frecuencia la boa constrictor o jiboia (Boa constrictor), el oso perezoso de tres dedos (Bradypus variegatus) y la iguana (Iguana iguana), entre otras especies.
Según las noticias reportadas, se calcula que aproximadamente 5793 individuos vivos fueron decomisados, principalmente loros y tortugas terrestres, posiblemente destinados a mercados de mascotas o colecciones privadas. Es importante resaltar que a pesar de la cantidad de reportes de confiscaciones, durante el primer semestre de 2021, solo 82 personas fueron arrestadas por su presunta participación en actividades de tráfico de fauna silvestre, de las cuales 61 eran de Colombia, 13 de Brasil, 5 de Perú, 2 de Ecuador y 1 persona de Bolivia.
Más cifras preocupantes sobre el tráfico de fauna silvestre en los países andino-amazónicos
En el análisis realizado a partir de estas noticias, se destacó que en Colombia más de 22 mil huevos de iguana (Iguana iguana) fueron decomisados por la Policía Nacional entre los meses de enero y febrero; mientras que en mayo, la misma autoridad incautó 1200 tortugas bebés vivas del género Trachemys. Por otro lado, en Ecuador, 185 tortugas gigantes de Galápagos (Chelonoidis sp.) fueron halladas en el interior de una maleta y decomisadas en el aeropuerto de Baltra, en Galápagos, a través de un operativo realizado por el Ministerio de Ambiente y Agua y Transición Ecológica (MAATE) en el mes de marzo.
En el caso de Perú, en mayo del presente año, un cargamento de 1745 ranas gigantes del lago Titicaca (Telmatobius culeus) vivas, fue decomisado en la región de Puno, en un operativo realizado por el Servicio Nacional Forestal y de Fauna Silvestre (Serfor) y Aduanas. En el mismo mes, en La Paz, Bolivia, 12 quirquinchos (Chaetophractus vellerosus) fueron decomisados por la Policía Forestal y de Preservación del Medio Ambiente. Por otra parte, en Brasil, un total de 8,9 toneladas de paiche seco (Arapaima gigas) fueron decomisadas de una embarcación con destino a Manaos, mediante un operativo de las fuerzas policiales y de control de la Base Arpão en Amazonas.
Frente a este contexto, desde 2019 WCS viene trabajando, a través de la Alianza por la Fauna Silvestre y los Bosques, en acciones para combatir el tráfico de fauna silvestre, en colaboración con las diferentes entidades gubernamentales de Colombia, Ecuador, Perú, Bolivia y Brasil.
Con el fin de contribuir a la generación de información sobre tendencias, que permitan una mejor comprensión de esta problemática y sus dinámicas, se han desarrollado estudios de diagnóstico nacionales en los cinco países y zonas de frontera, con el propósito de compartir estos datos con la sociedad civil, y así motivarla a participar en la labor de control, prevención y conservación de la biodiversidad de los países andino-amazónicos, en conjunto con las autoridades encargadas.
Conozca la infografía con la información de este reporte aquí. (https://mcusercontent.com/bee23d89bcac084ad69685b0e/files/49dc37cc-9e98-99cc-77ad-63b23457c295/Reporte_sobre_tr%C3%A1fico_de_fauna_enero_a_junio_del_2021.pdf)
Para contacto de prensa:
Sobre la Alianza por la Fauna Silvestre y los Bosques
La Alianza por la Fauna Silvestre y los Bosques es una acción regional impulsada por la Unión Europea e implementada por WCS y WWF que busca combatir el tráfico de fauna silvestre y madera, a través del compromiso de la sociedad civil en el fortalecimiento de la aplicación de la ley y la cooperación con y entre las autoridades de Colombia, Ecuador, Perú, Bolivia y zonas de tri-frontera con Brasil.
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Dora Arévalo. Especialista Senior de Comunicaciones Programa Contra el Tráfico de la Vida Silvestre -región Andes-Amazonía-Orinoquía. Wildlife Conservation Society (WCS).
Correo electrónico: darevalo@wcs.org